sábado, 23 de febrero de 2013

ARTHUR RACKHAM





Arthur Rackham nació en Londres en el seno de una familia que cobijó a 12 hijos.
En 1884, a la edad de 17 años, fue enviado a Australia para mejorar su delicada salud. Ya a los 18 años comenzó a trabajar como empleado en una repartición estatal mientras estudiaba en la Escuela de Arte Lambeth.
En 1892 dejó su anterior puesto para empezar a trabajar como periodista e ilustrador. Sus primeros dibujos fueron publicados en 1893 en el libro “Al Otro Lado” de Thomas Rhodes, sin embargo su primer trabajo serio fue en 1894 para “Los Dialogos de Dolly.
En 1903 se casó con Edyth Starkie , con quien tuvo en 1908 una hija a la que bautizaron Barbara.
Rackham ganó una medalla de oro en la Exposición Internacional de Milán de 1906 y otro en la Exposición Internacional de Barcelona en 1912.
Sus obras fueron incluidas en numerosas exposiciones, incluyendo una en el Museo del Louvre en París, en 1914.
Finalmente murió en 1939 en su casa de Limpsfield , Surrey.
 
Arthur Rackham es considerado como uno de los dibujantes líderes de la llamada “Edad de Oro” de la ilustración británica; podríamos definir este período desde 1900 hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial. Durante esa época, se produjo un importante mercado de libros de alta calidad que generalmente se obsequiaban para Navidad.
Muchos de estos libros se produjeron en ediciones limitadas y a todo lujo, sin desmedro de que ésta fuera seguida, en determinados casos, por otras más modestas.
El inicio de la Primera Guerra en 1914 marcó el inicio de una reducción en el mercado esos libros de alta calidad, lo que fue seguido, durante los años ’20, por un alejamiento del gusto del público por la fantasía y las hadas.
Los trabajos de Arthur Rackham se han popularizado desde su muerte, tanto en América del Norte como en Gran Bretaña, mientras que sus imágenes han sido muy elegidas por las imprentas para ser utilizadas en la manufactura de tarjetas de felicitación. Por otro lado también varios de sus libros se continúan imprimiendo actualmente.
En otro plano, podemos recordar que el popular músico Eric Woolfson, recordado -entre otras cosas- por sus obras junto a Alan Parsons, se sintió particularmente fascinado e inspirado por Rackham. Eric sintió que Walt Disney también fue notoriamente influenciado por aquel trabajo, por lo que pensó en escribir un musical sobre él. Lamentablemente su vida no le resultó tan inspiradora como sus ilustraciones, por lo que Eric volvió su atención hacia otras fuentes.
Hoy en día, las pinturas y dibujos originales de Rackham continúan siendo muy buscados, y cotizados, en las grandes casas de subastas de arte internacional.



















 Alicia en el País de las Maravillas


















miércoles, 13 de febrero de 2013

EL FANATISMO - Juan C. Lafinur


EL FANATISMO

¿Cuál es ese montruo fiero
que ha desvastado la tierra,
declarando al justo guerra,
y enlazando al embustero?
¿Quién el que al hombre sincero
le calumnia de ateísmo?
El fanatismo.

¿Cuál es la causa fatal
de la falta de instrucción,
de haber tanto motilón
y de propagarse el mal?
¿Quién el de que un animal
nos elogie el servilismo?
El fanatismo.

¿Cuál es el que a los tiranos
protege en sus agresiones,
y fomenta disensiones
entre amigos y entre hermanos?
¿Quién el que a los ciudadanos
les extingue el patriotismo?
El fanatismo.

¿Cuál, el que a la libertad
la mira siempre con ceño,
y en destruirla hizo empeño
con una falsa piedad?
¿Quién hizo que iniquidad
sustituyese al civismo?
El fanatismo.

¿Cuál ha sido el instrumento
para oprimir al virtuoso
y para que el poderoso
le cause al débil tormento?
¿Quién formó tanto convento,
escuela de barbarismo?
El fanatismo.

Juan Crisóstomo Lafinur (1797-1824)
Nació en La Carolina, provincia de San Luis.
En 1810 ingresa al colegio Monserrat de Córdoba, en el que se gradúa como Maestro de Arte.
En 1814 se incorpora al ejército del Norte en Tucumán y ya en 1819 accede por concurso a una Cátedra de Filosofía, a la que renuncia en 1822.
Finalmente fallece en Chile como consecuencia de las graves heridas recibidas como producto de un accidente con su caballo.